Sebastián Viera y Giovanni Hernández se abrazan tras clasificar a cuartos de final de la Copa Sudamericana.
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Hansel Vásquez.

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Viera metió las manos y clasificó a Junior a cuartos de final de la Sudamericana

Tras empatar 0-0 en el global, derrotó 4-3 en los tiros penales a Montevideo Wanderers.

Sin jugar su mejor partido, pero siempre amparado en las manos salvadoras de Sebastián Viera, Junior clasificó este miércoles a los cuartos de final de la Copa Sudamericana al empatar 0-0 en el global y lograr el triunfo en la serie de cobros desde el punto penal por 4-3.

No muchos aficionados fueron a seguir a Junior. El momento del equipo no invitaba amucho tras las grises actuaciones y los pobres resultados recientes.

Pero era bien sabido por los hinchas que sí fueron, que lo que verían era un equipo jugándose la vida tras el resultado alcanzado en el duelo de ida del campeonato, que se empató sin goles en Montevideo. 

Tras unos primeros intentos de James Sánchez de media distancia, Junior abrió la cuenta de oportunidades gracias a un disparo desde fuera del área de Roberto Ovelar que se abrió ángulo de tiro para exigir una ágil reacción del guardameta Leonardo Burían, a los 11 minutos.

Siete minutos más adelante, producto de un buen pase de Vladimir Hernández, el lateral izquierdo German Gutiérrez quedó de frente al arco para intentar un disparo que nuevamente quedó en las manos del arquero ‘charrúa’.

Por algunos minutos la tónica del juego se mantuvo sin cambios. A veces con peloteo de parte de ambas escuadras, otras veces sin idea por parte de los rojiblancos que no lograban hilvanar las jugadas para concretar en la meta visitante.

Poco se vio en la cancha hasta los 31 minutos, cuando Vladimir Hernández conectó desde fuera del área un zapatazo que hizo estirar a Burían para que de nuevo mostrara sus dotes de atajador, esta vez estirándose al poste izquierdo para evacuar el peligro.

A cinco minutos de la conclusión de las acciones, Sánchez, de los más activos durante el partido, se coló en el área y recibió una gran asistencia de Yony González, para disparar desviado a las tribunas.

Al final de las acciones, sin haber jugado un gran partido, pero ante un pobre rival que nunca lo puso en verdaderos problemas, Junior se fue al camerino con la presión de tener solo 45 minutos para definir el partido o esperar la sentencia de los tiros desde el punto penal.

La segunda mitad arrojó mucho menos que la primera. Fue un largo periodo de correr y de intensidad pero sin ideas. Para poner algo más de fuerza en el ataque, Édinson Toloza fue enviado al campo de juego. Le siguió Michael Rangel para tratar de rescatar la ofensiva.

Sin embargo, las posibilidades fueron menores a las esperadas. Solo a los 18 minutos Toloza se inventó un a media volea para mandar la pelota por fuera del arco y a los 32 Ovelar desperdició una pelota en el área.

En el minuto final, Toloza se escapó por la banda derecha y en un ángulo muy cerrado reventó su disparo contra el travesaño.  Fue un partido sin grandes opciones, siendo esta la más clara, incluso de toda la serie.

Con el partido igualado sin goles, se llegó el momento de la definición desde los puntos penales.

El inicio fue equilibrado, porque en los primeros cuatro cobros ni Vladimir Hernández y Roberto OVelar fallaron por los locales, así como tuvieron buena puntería Sergio Blanco y Mauricio Gómez por los ‘Bohemios’.

En el tercer cobro, James Sánchez empalmó un mal tiro que fue fácilmente detenido por el guardameta. La respuesta de Santiago Gaspari fue asegurar el tiro para tomar una parcial ventaja 3-2.

Sin embargo, pronto estaba por venir el resurgir de los rojiblancos. En un cobro lleno de rabia Michael Rangel aseguró con un zapatazo al centro del arco y arriba.

Tras la emotividad, el portero Sebastián Viera, casi un espectador más en el partido, comenzó a arengar a sus fanáticos. No los defraudó. En una gran estirada, contuvo el disparo de Joaquín Vergüez para volver a equilibrar las cargas 3-3.

Para la serie final, Toloza tomó la responsabilidad y con su inconfundible y desconcertante estilo disparo para engañar al meta Burían.

Tras esto, Viera tenía toda la responsabilidad para volver a ser el ‘Ángel del arco’. No falló, alcanzó a meter su mano para desviar el tiro de Rodrigo Rivero, que terminó estrellado contra el vertical y saliendo. Clasificando a Junior.  

Con esto, Junior llegó a ocho partidos sin ganar y cumplirá más de un mes sin poder sacar resultados diferentes a derrotas o empates. Aunque por lo menos los aficionados guardan una razón para un festejo corto y mesurado.

Junior jugará en los cuartos de final ante el elenco brasileño del Chepacoense, que eliminó al argentino Independiente de Avellaneda en la tanda de cobros desde el punto penal por 4-3. La llave arrancará en Barranquilla y cerrará en Brasil.

 

 

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